Odio como me hablas y también tu aspecto, no soporto que lleves mi coche ni que me mires así, aborrezco esas botas que llevas y que leas mi pensamiento, me repugna tanto lo que siento que hasta me salen las rimas, odio...odio que me mientas y que tengas razón, odio que alegres mi corazón, pero aún más que me hagas llorar, odio no tenerte cerca y que no me hayas llamado, pero sobre todo odio no poder odiarte porque no te odio ni siquiera un poco...nada en absoluto.
[. . .]
No hay comentarios:
Publicar un comentario